lunes, 10 de septiembre de 2012

 En los años siguientes Ligia María ostento varios nombres muchos de los nobles temen conformarse a l cambio de la ocupada de Ligia María, esto por supuesto subvino en la disminución de la clientela era solo por Ligia María en los paroxismos del amor le ofrecían de todo y Ligia María le había congraciado con el después se incorporo dejando al descubierto sus pechos inmaculados pero Silverio se adelanto hasta la cama Ligia María exultante obedeció ante los sorprendidos clientes y cortesanas estaba dispuesto a ser muy generoso con ella si es que Ligia María no se marchara con el Amparo miraba alternativamente al ofertante y a Ligia María mientras tanto miro  a Ligia María la pupila vuelve a sus aposentos el textileró quiso actuar con la energía que la situación ameritaba Ligia María no volvió a saber más de él y lloro toda la noche pero el valor solo le alcanzo a cortarse el cabello los primeros días lo logro sin mucho esfuerzos al poco tiempo almorzaban juntos fue a partir el incidente de Ligia María y Silverio la violencia era algo cotidiano en ellos Marcial Moro escapo de entre las llamas llevándose en brazos a Ligia María para no ser reconocido decidió probar suerte en el barrio de la tolerancia y donde las licencias de la vida eran resguardados por los soldados de la corona.

Podría decirse que era una prostituta para cada estrado las muchas que circulaban entre obispos las furcias se vendían a los funcionarios finalmente de la más baja especie la mayoría vivía al amparo de la noche y pagaba porciones de sus utilidades Ligia María que por su juventud y belleza estaba a la altura de las infantes, en cuanto llego causo gran alboroto entre las mantenidas consiguió un buen lugar para Ligia María su talento seducía más que su belleza Marcial haber sabido ahorrar hubiera hecho fortuna con Ligia María con la tranquilidad de tener bajo aldabones inviolables al menos eso era lo que creía Ligia María, trabajaba por las madrugadas dormía toda la mañana aquella madrugada después de abarraganarse con ocho hombres diferentes entonces Marcial que nunca la golpeaba en el rostro para evitar las devaluaciones luego avanzo hacia ella para seguir golpeándola un paso más y te rompo el ánimo Marcial se lanzo hacia ella no esperaba que el cuerpo terminara de derrumbarse tendría que pasar mucho tiempo para que volviera a estrecharlo.

Para escapar de tanto recuerdo malsano Ligia María se traslado al puerto escogió un buen lugar en la bahía aprendió que la vida de ese modo Ligia María que nunca conoció la magnitud de los ataques del pirata pronto se hizo conocida en las veredas del muelle nunca le había querido aceptar pero una noche Ligia María se dio cuenta que era necesario depender de un mediador la propia Ligia María acostumbrada a no restarse atributos si alguien quiere amancebarse gratis Ligia María se sintió segura Fulvia invito a Ligia María a una fiesta en los barrancones pronto se hizo costumbre que la imagen saliera en andas se escabullo a la hacienda donde vivía el patrono era un margrave holgazán empezó vendiéndose a los propios esclavos del barracón poco después resuelta a probar fortuna cuando se incorporo ella nunca había sido sometida por nadie para comprar su libertad después de conocer a Ligia María al día siguiente Fulvia le dio la nueva a Ligia María le ofreció llevarla a probar fortuna en esas tierras pero Ligia María que abrigaba la esperanza de ver desembarcar a su hermano de pronto apareció en la niebla un hombre encubierto con innumerables rastros del abrasamiento el hombre se le arrebato y tras cubrirse precipitadamente lo condujo a la posada de los hebreos luego con manos delicadas le quito la capucha para ver nuevamente su rostro Ligia María dio con la pensión de Baldes se presento en ella con la cornamusa bajo el brazo.

TRES
Lo que Balmes menos imaginaba era encontrarse con Ligia María la ausencia de la cornamusa prolongaba su agonía fue cuando se animo a escribirle una esquela a Ligia María la tarde en que apareció por fin les había dado caza eran los mismos que Balmes había visto subterráneos pudo sospechar que Ligia María tocaría su puerta Balmes no conseguía sacar la voz le parecía irreal el talle de Ligia María no parecía tener prisa ante la mirada pasmada de Balmes Ligia María se dispuso a retirarse la resolana entraba por la ventana luego cerro la ventana Balmes la abrazo y largamente hundió su cara en sus pechos montuosos cuando quedaron desnudos Ligia María se soltó el cabello largo rato Balmes quedo extasiado ante los hombros redondos Ligia María le compenso con sus mejores caricias bucales Ligia María lo dejo reposar largo tiempo sobre su perfecta desnudez Balmes volvió a caer sobre el lecho Ligia María compuso una expresión sarcástica Balmes se incorporo tuvo miedo que alguien le oyera En realidad tenia plano irse a esa mañana cono se lo había prometido a Ligia María por violentar las regulaciones de Dios Balmes lo encontró en esta situación sobreponiéndose a la desconfianza no se dio por vencido lo busco esa misma noche en la taberna Balmes lucho para que saliera no tuvo el valor de presenciar la incineración de los sentenciados.

Ligia María paso a buscar a Balmes esa misma noche luego Balmes le conto a Ligia María que los primeros frailes que llegaron a la colonia para obtener hijos Ligia María lo entendió así y desde entonces permitió que lo solazara contemplándola tenían un antiguo instinto para la sensualidad Ligia María seguía trabajando en los muelles luego insistió que leyera los infolios cuando Ligia María le tuvo entre las manos le dio a Balmes un beso honrado.

El día en que Ligia María encontró a su hermano, un nuevo temblor sacudió el puerto se había pasado la vida buscándolo y esperándolo supo que su búsqueda había terminado dejo en su vida y había tratado de olvidarlo escucho las desesperadas explicaciones de Ligia María sin que se le moviera un musculo de su rostro.

Antes de que la tierra se despabilara en el más grande d los terremotos registrados en la costa, los pájaros abandonaron el puerto Balmes y Ligia María sobrevivieron a la catástrofe al salir a la calle llena de cascotes y lamentos Balmes alcanzo a cubrir a Ligia María con su capa después recorrieron los avenamientos en toda su longitud Balmes apago su antorcha y ayudo a Ligia María a subir por los asideros de hierro del muro después Ligia María logro escapar del puerto sin abre contraído la peste luego nunca supo de Balmes.

La epidemia venció todo intento por contenerla Balmes no dejo de pensar en Ligia María los barchilones y soldados se encargaron de guardar el orden al momento de abordar el barco Balmes que la noche anterior había sentido los primeros síntomas de la fiebre  vio la distancia las antorchas en la bahía se arrepintió de lo que estaba haciendo por unos instantes mantuvo la cara alzada hacia la tormenta Ligia María sudorosa después del parto su primer llanto en la cama del hospicio para madres solteras.     

lunes, 3 de septiembre de 2012


EL LLANTO EN LAS TINIEBLAS

UNO

La madrugada Balmes conoció a Libia María en el puerto sacudió un temblor, el velador en vez de anunciar la hora invoco al santo patrono de los patronos de os temblores Balmes se echo encima de la capa de vuelta y media abandono el bodegón los parroquianos los despidieron con las copas en alto. Decidió dar un rodeo por el muelle se interno por la parte más pestilente del mercado por las madrugadas era guarida de vagabundos, traficantes hasta leprosos que solían treparse de la piernas de los caminantes cruzo el sector de lo baratillos donde un pordiosero amenazo con soltar a los perros si no le lanzaba una limosna. Se pego a la pared para confundirse con las sombras y observarlas sin haber visto, todas las mujeres vestían trajes baratos y tenían el cabello suelto Balmes se estremeció con la certidumbre le había ofrecido llevarlo a conocerlas al terminar la velada las mujeres se apartaban Baldes jamás intento acercarse a las mujeres estuvo esperando que el grupo de mujeres se disgregara que se retirasen con los clientes después todas seguían en su lugar el velador anunciaba una novenario cansado de esperar Balmes considero la posibilidad de desandar lo avanzado y enfrentar a los vecinos Balmes cruzo las dos puntas de la capa las mujeres reconquistaban su emplazamiento lo único que hizo es estar dentro de la capa. Cuando tomo conciencia de la situación y sus voces alarmantes se confundían con sus latidos aterrados Balmes se agacho a recogerla el barullo de las mujeres se convirtió en el movimiento de repliegue Balmes pudo contemplar la purpura de la hora la mujer era alta perfecta de unos enormes ojos oscuros y sus manos blancas que alumbraban la oscuridad. Cuando llego a su habitación, cerró la puerta la mujer no supo cuanto tiempo estuvo ahí agonizando en las tinieblas la humedad de las paredes, el llanto, la miseria que sentía por sí mismo.

LA MADRUGADA Siguiente grisácea lo encontró despierto en su cama aun pensando en ella las campanas de la iglesia de San Andrés anunciaron las diez de la mañana y Balmes puso a hervir un tazón con agua se levanto del medio cuerpo preparo una tisana después que se hubiera enfriado. Dejo todo el esplendor del carruaje se decía que tenía un vínculo con el propio monarca detrás venían las carretas todo terminaba con una corte de esclavos el silencio de los habitantes contemplaban ambos lados del camino el mercado volvió hacer el mismo los monjes hablaban todos los idiomas.  Al ver el puente de la bahía Balmes volvió a recordarse de ella entendió que algo irremediable había empezado. A l medio día Balmes abrió su puerta dispuesto a comer volvió a sentir la presencia de la muchacha religiosamente abandonaba el edificio cuando llego la hora se echó la capa sobre la cabeza a la altura de la plaza empezó a lloviznar y el aire se lleno de olor a tierra mojada Balmes siguió hacia el muelle se situó en unos de los ángulos menos iluminados  por primera vez tuvo varias notas alteradas porque todo lo que hacía es seguir pensando en ella terminaba la velada Balmes escondía el instrumento bajo la capa guardo dentro del estuche el local desbordaba en botellazos rotos llego el comendador de las inquisiciones Herrerillo desvio la mirada hacia la neblina del muelle Balmes dijo que sus bienes serian confiscados Balmes no pudo apartar de la cabeza el acuerdo de la muchacha Ligia María la ramera de las callejeas coloco las calderillas de cordón sobre la mesa haciéndole pensar en un viaje sin retorno.

 

DESPERTO Angustiado cuando el velador anunciaba el medio día cogió el libro de turno que le había prestado a Herminio Bisbal llego con la cara pulcra del almuerzo se cambio con la ordenanza del cabildo para llegar al hospicio del puerto sin conflictos con los tribunales afortunadamente estaban tranquilas a esa hora por unas cuantas damas que se desplazaban por las veredas dejando un ojo al descubierto Balmes seguía acarreando a las autoridades des siglos antes a las mujeres se les cedía a las tentaciones del adulterio un concilio arzobispal amenazo con la excomunión se dividió en bandos Teresa Hurtado de Mendoza salió a las calles intentaron desterrar la tradición los funcionarios atacaban los mandatos de ese modo habían llegado a convertirse en atractivo de la colonia y de comida criolla y su vestido nacional Balmes llego al hospicio había absorbido siglos de moribundos las covachas repletas parecían las de un mercado Balmes se reunió con músicos media hora después las novicias impusieron luego buscaron unos tragos Balmes no los acompaño estuvo deambulando por los almacenes cuando volvía a la pensión encontró a una mujer misteriosa en la puerta de la iglesia que le cerró el paso la migración gitana databa de la misma época cientos de gitanos arribaron al puerto y condenaron a los lideres y los pocos que sobrevivieron se refugiaron en las defensas subterráneas Balmes no opuso resistencia hacia los túneles los gitanos Vivian por su desgracia la mujer le pidió que le mostrara las palmas de su mano la adivinadora se concentro Balmes reparo en su melena la adivinadora dudo de Balmes cuando recogía la cornamusa sintió la presencia de la mujer le devolvió la sonrisa termino recoger el instrumento se despidió de la adivinadora.

LUNES La tierra volvió a sacudirse los pregoneros nocturnos empezaban su labor los temblores no eran extraños cada vez que se presentaban uno las campanas de la iglesia empezaban a tocar y la vendedoras cambiaban sus tinajas por agua serena las imágenes religiosas eran paseadas por el puerto se cubrían el rostro con ceniza las mujeres vestían elegantes atuendos  el terror crecía se representaban temblores sucesivos desde entonces estaba prohibido las construcciones de más de dos pisos la suciedad contribuía al problema la gente caminaba de las materias se decía que los cielos se cerraban hasta que surgían plagas Balmes abandono el bodegón porque el temblor de aquella noche no se asemejaba tomo el largo desvio que llegaba al barrio de la tolerancia volvió a ver a Ligia María estaba pálida siguió observándola regreso a su guarida cuando la vio marcharse.

 

EL FIN de semana la gente que no sintió a la lectura de las dominicas corrió a los muelles a ver el desembarque de los esclavos, Balmes aprovecho las calles silenciosas desguarnecidas para visitar la universidad al pasar los muelles alcanzo ver las velas del barco, entre ellos había un adolescente cargados de cadenas. Balmes siguió de largo pensando en los horrores de la esclavitud luego su pensamiento volvió a Ligia María, los edificios del virreinato estaba iluminado camino unas cuadras pegado a las alturas murallas de Santiago de Cercado, por un momento tuvo el impulso de pasear por el portal de botoneros admirando las obras de textileria cada vez que entraba en ese edificio se sentía libre imaginando su belleza arquitectónica. En la primera construcción estaba el huerto principal, en el segundo pabellón se hallaba el estanque, finalmente en la última etapa se encontraba la residencia de la sociedad docente. Los pasos de Balmes  resonaron de los corredores rumbo al dormitorio Balmes golpeo la puerta para saludar Herminio Bisbal. Estableció en el virreina fue alumno del esclarecido medico don Francisco y Roldan comenzó ejerciendo en los monasterios de pobres, sus métodos desarrollados durante el largo viaje consistían en colorear al enfermo con diferentes tonalidades. Herminio Bisbal fue invitado a integrarse como investigador en la academia médica. Tenía pocos amigos  sobre todo los alumnos que le respetaban Baldes toco el heliconio en lugar de la cornamusa deslumbrando con su virtuosismo el motivo de esa visita era la restitución del libro Balmes había devorado el último fin de semana  Baldes dijo liquidar el tema y lo hizo con resignada expresión de quien pierde una partida de tablero Balmes espero un poco caminando con extrema lentitud mientras veía en el agua de la fuente el vuelo alto de unas aves luego quedo escanciado frente a cientos de libros supuso que la vedada habitación que surgía ante sus ojos. Balmes lo sostuvo con una sola mano y lo miro desde todos los ángulos  luego se volvió cegado por el torrente de luz del ventanal.

ERA CONCIENTE de que su existencia literalmente dependía de la cornamusa embozado bajo la capa había previsto dejarlo tal como se lo pedía. En el camino el ciego le conto que se llamaba Lizardo Valera insistentemente Lizardo se obstino en que Baldes conociera su hogar pero el verdadero patrimonio de la casa estaba en la galería de los instrumentos cuando Baldes entro a conocerla sostenía el mismo una palmatoria cada instrumento pegado a la pared en el fondo había algo oculto entre sombras. Al día siguiente se presentó en la casa del ciego no podía concebirse un hombre más diestro en la música, el anciano le demostraba las técnicas de ejecución liego se despidieron con una taza de chocolate Balmes no se conformaba con el horario de clases. Los monjes que eran los mismos que mendigaban en los mercados se encontró con Baldes luego Baldes no entendió el comportamiento del anciano. Desde entonces adquirió el habito de soplar cada tarde la cornamusa así paso varios días memorizando sus versos luego salió en busca de Ligia María.

SABIA que le encontraría en el puente la insurrección de su pecho iba en aumento a cada nuevo paso, oculto en su esquina espero a Ligia maría ella iba sola Baldes la abordo torpemente. Ella siguió mirándolo durante un rato con la misma expresión con que se mira el océano Balmes le mostro unas calderillas en la palma de su mano Ligia María había comenzado hablar incesantemente. Pero Balmes no lograba componer la frases a pesar de sus esfuerzos Ligia maría fue directamente a transar con el hombre de turbante, cuando Baldes ingreso a la habitación se encontró perdido en una dimensión pero Balmes no se movía se mantenía alerta Ligia María lo miraba extraña Balmes continuo en su lugar se estremeció con la visión provocada. Pero Ligia María se adelantó hacia el Balmes oía palpitar con violencia las venas de su cuello Ligia María se apartó de El Balmes acciono de pronto, devolvió el capuchón a su lugar y abandono la habitación.

DOS

LA NOTICIA tuvo mayor efecto que si hubiese sobrevenido un naufragio, el barco más de carga que de pasajeros había partido de Venecia quince días antes, todo buscaban nuevos horizontes en las colonias americanas dos días después se declaró oficialmente la epidemia y se supo que muchos se lanzaron al mar tratando de huir. Desesperado el medico del barco agoto todos los medicamentos disponibles en el dispensario, una semana después en esas espantosas condiciones el barco alcanzo Veracruz lo único que pudieron hacer por los enfermos fue abastecerlos con actuarios la travesía fue desde entonces más angustiosa, una cuadrilla de barchilones y rapabarbas antes de quemar el barco unos agentes revisaron encontró niños de pocos años un hombre y una mujer, los pequeños hermanos fueron hospitalizados mientras los tribunales resolvían el caso. Pronto las oficinas del registro se olvidaron de los niños, amparados en la sombra los niños aprendieron a depender uno del otro, desde el momento en que vieron a sus padres se lanzaron por la borda del barco la niña se levantó con calma vistió a su hermano, doblo sus pocas pertenencias el hombre que vestía leonas de chicote y capa segoviana. A la niña no se le había visto llorar hasta ese momento una hora después entraban a una construcción ventilada, cuando la niña llego las internas del instituto eran veinte. El hombre la llevo hacia el interior y la entrego a las asistentas, mientras las asistentas cumplían con sus deberes, era un hombre en verdad diestro en las inversiones esa mañana se encontraba particularmente contento, por eso después de las nocturnas cantadas por un clérigo renegado. Lo que no le dijo por supuesto fue que estas compañías tenían la costumbre de comprar niños de perpetuar su voz aflautada.

LIGIA MARIA permaneció en el instituto hasta los trece años desde que se hizo cargo de la escuela las sabanas Ligia María había sido la preferida de todos contra las severas admoniciones de la época Ligia María había sido recibida en la biblioteca sus primeras lecturas fueron los libros aprobados por la censura clerical Ligia María se entusiasmó viendo cerca su libertad. En cuanto acabo la tarde las esperaban varios hombres encopetados, impacientes que callaron cuando Ligia María apareció luego dio la orden de quitarse la ropa a medida que se despojaba de la ropa, mostrando sus hombros saludables Ligia María tenía cinco años para aprender a conducirse luego el viudo lo hizo pasar directamente a la alcoba en el instituto bajo los auspicios del antiguo benefactor  Ligio María y el viudo se sentaron en una barbacana basto una señal del viudo para que los músicos desapareciera, amanecieron abrazados en una inmensa cama los esclavos que habían suicidados en la hacienda del viudo Ligia María en la alcoba del señor yacían embriagados en los cobertizos que también se vistió y llorando abandono la casa da Amparo Rigores a la hora en que esta paso a recogerla